miércoles, 30 de abril de 2008

MIS OJOS

MANAMA

PROPUESTA UN MUNDO LIBRE DE QUEJAS

Te propongo un reto de 21 días.Se trata de algo que -de lograrlo -haría de nuestra vida algo mejor.Tendríamos mejor salud,menos enfermedades, mejor ánimo, menos dolores, más autoestima, relaciones más satisfactorias:seríamos personas más felices y serenas.
No consiste en una dieta o dejar de fumar. Si alcanzamos el objetivo, nuestra vida cambia. Seis millones de personas en el mundo ya lo han logrado, aunque suene a frase de ‘infomercial’.
Es un plan muy simple, creado por la organización ‘A Complain Free World’ (Un mundo libre de quejas), fundada por el pastor Will Bowen, quién en el sermón matutino de un domingo, invitó a su congregación a iniciar este reto de tres semanas.
Es algo muy simple: No quejarse, no criticar y no contar chismes de nadie. ¡¡¡¿¿Te imaginas??!!!
Para probar que hablaba en serio, Bowen les repartió a toda su congregación una pulsera morada para que -en el momento que se sorprendieran en la queja, en la crítica o en el chisme- se cambiaran la pulsera de muñeca -a fin de hacerlo conciente- e iniciaran otra vez el conteo. Varias de las personas que participaban del reto -y que decían no quejarse mucho -se dieron cuenta de que lo hacían un promedio de ¡20 veces al día!
Contaminación auditiva pura.
Quejarnos se ha convertido en una epidemia.¿Has notado cómo cuando nos quejamos del clima, de la seguridad, de nuestro cuerpo, de que el dinero ya no alcanza y demás, lo único que logramos es sentirnos peor? Y si al menos sirviera para solucionar algo… pero todo lo contrario. Significa enfocar nuestra atención y energía en las cosas que NO queremos, y no en las que SÍ queremos.¿Por qué 21 días? Porque así como un huevo de gallina tarda 21 días en formarse, también se requiere lo mismo para formar una nueva conducta o un hábito en el hombre.
Y si la crítica la pienso pero no la digo ¿cuenta? No. Gracias a Dios, no cuenta. Sólo si sale de nuestra linda boquita Quienes lo han logrado reconocen que fácil no es, sin embargo comentan que después de las tres semanas o más que necesitaron, dejaron incluso de criticar con la mente…La clave es no darnos por vencidos.
Te invito a que empecemos ahora. No necesitamos tener una pulsera, cualquier objeto es bueno: el reloj, poner una piedrita o una moneda en el bolsillo del pantalón, lo que sea… Lo que importa es darnos cuenta. Nuestras actitudes y nuestras palabras sólo reflejan lo que pensamos. Así que ¿qué vida queremos?Nos quejamos por la misma razón por la que hacemos cualquier cosa: recibimos un beneficio a cambio. Creemos conseguir atención, aprobación o la simpatía del otro. Como cuando de chicos, nos hacíamos los enfermos para no ir al colegio el día del examen (la salud es un tema taquillero en la lista de quejas). Pero ¿a qué costo? Los doctores estiman que dos terceras partes de las enfermedades se generan ¡en la mente!
Te invito a que cambiemos lo que decimos. Dejemos de quejarnos, de criticar y de propagar chismes, que lo único que hacen es dañar a otros y a nosotros mismos. Modifiquemos lo que pensamos, para no atraer más de lo que no queremos.
Dicen que para lograr una meta, es importante hacer el compromiso con alguien, así que en el momento en que escribo esta columna comienza mi reto y me comprometo contigo, querido lector/a a lograrlo. Si quieres enviarme el tuyo, bienvenido. Intentemos hacer de este mundo algo mejor.*
Bajado de la red
Acepto el compromiso desde hoy y te invito a que te animes y lo hagas también.
Un abrazo en la Luz

LEYES NATURALES

Como la gravedad, son patrones fundamentales de la naturaleza y la vida. Describen las cosas como son en realidad, en oposición a como uno piensa que son en realidad o cómo desearía que fueran.
Obedecerlas puede ayudar a las personas a ganar control sobre su vida, mejorar sus relaciones, elevar su productividad personal y experimentar la paz interior.
Ley 1. Se controla la vida al controlar el tiempo.
Controlar la vida significa controlar el tiempo, y esto último significa controlar los eventos que ocurren en la vida. El verdadero punto es: ¿qué eventos puedo controlar? Enfocarse en el control de los eventos de la vida constituye toda la diferencia.
Ley 2. Los valores que gobiernan la vida son la base del éxito personal y de la satisfacción.
Cada persona vive de acuerdo con un conjunto único de valores rectores. Estos valores son las cosas más importantes para uno. Son representados por las respuestas más claras que es posible dar a tales preguntas: ¿Cuáles son las principales prioridades en mi vida? Y de estas prioridades, ¿cuáles tienen mayor valor?
Ley 3. Cuando las actividades cotidianas reflejan los valores rectores, se experimenta una paz interna.
A medida que alguien concentra su tiempo y energía en alcanzar tareas que tienen verdadero significado en la vida, la persona es cada vez más productiva y alcanza una paz interior: una sensación de paz y unidad.
Ley 4. Para alcanzar cualquier meta significativa, es preciso salir de la zona de comodidad.
A veces se desarrollan zonas de comodidad mentales, emocionales, sociales o psicológicas. Salir de la zona de comodidad requiere esfuerzo y compromiso.
Ley 5. La planeación diaria aprovecha el tiempo mediante un aumento en el enfoque.
El costo es pequeño: sólo diez a quince minutos al día, pero se disfrutarán muchos beneficios a lo largo del día, como tareas definidas con claridad con fechas límite, aumento del enfoque en las tareas más importantes, pasar menos tiempo entre proyectos, y un sentido mayor de logro al final del día.
Ley 6. La conducta es un reflejo de lo que se cree en realidad.
La creencia refleja lo que se cree en realidad, y si la conducta no parece reflejar una creencia afirmada de manera consciente, se deberá mirar con cuidado las creencias en conflicto.
Ley 7. Se satisfacen las necesidades cuando las creencias concuerdan con la realidad.
¿Cómo es posible decir que una creencia, actitud u opinión sea correcta? Si los resultados de la conducta cumplen con una o más necesidades básicas, quizá se tenga una creencia correcta. A la inversa, si los resultados no cumplen con las necesidades, se podrá estar bastante seguro de que la creencia es incorrecta.
Ley 8. Las conductas negativas son superadas al cambiar las creencias incorrectas.
Las creencias incorrectas producirán conductas negativas y de derrota en uno mismo. La conducta negativa muchas veces es resultado de tratar de cumplir las necesidades de la vida con creencias incorrectas o inapropiadas.
Ley 9. La estima de uno mismo debe venir en último término, del interior.
Si se cree que el valor propio depende de la aprobación de los demás, es posible que la persona se encuentre actuando en sentido contrario a sus valores más profundos. Sólo cuando se vive de acuerdo con los propios valores se encontrará la estima de uno mismo y la satisfacción que proviene del interior.
Ley 10. Dar más y se tendrá más.
Cuando alguien tiene un exceso de algo: riqueza, talento, conocimiento, capacidad, experiencia; se tiene la obligación de compartir ese exceso con los demás, de modo que constituya una diferencia. Si todos nos condujéramos de ese modo, la mayoría de los problemas del mundo se podrían resolver.