Seguramente has escuchado el dicho de
“una manzana al día mantiene lejos al doctor” y esto es cierto con las manzanas
verdes. Todas las variedades de manzana tienen grandes cualidades para nuestra
salud, pero las verdes particularmente nos ofrecen proteínas, vitaminas,
minerales y fibra. Son bien conocidas por sus beneficios contra los desórdenes digestivos
y los bajos niveles de colesterol bueno, regulador de los niveles de glucosa y
mejora del apetito.
Las manzanas verdes en ayunas nos
ayudan a mantener controlados algunos aspectos vitales para nuestro día a día y
para nuestra salud.
Antioxidantes
Las manzanas verdes son una de las
principales fuentes de flavonoides en la dieta occidental y son ricas en
vitamina C. Los flavonoides que más encontramos en este tipo de manzanas son la
cianidina y epicatequina. Estos flavonoides y la vitamina C actúan como
antioxidantes y erradican los radicales libres que causan daño en las células.
La ventaja de comer una manzana verde en ayunas es que le damos a nuestro
cuerpo la capacidad de combatir estos radicales desde el primer momento del
día. Esto ayuda a la producción de células sanas y reduce la aparición de
enfermedades crónicas. Las manzanas verdes son uno de los mejores enemigos de
las enfermedades cardíacas, accidentes cardiovasculares y diabetes.
Pérdida de peso
Una manzana verde en ayunas ayudará a
quienes estén en el proceso de pérdida de peso. Debido a que son muy bajas en
calorías, apenas 80 calorías por pieza, y su alto contenido de fibra podrás
combatir el hambre matutina .Desde luego que una manzana verde no es alimento
suficiente, lo ideal es comerla justo cuando te despiertas para que tu
metabolismo comience a trabajar mientras haces tus tareas previas al desayuno.
Al consumir una manzana de esta forma, permitimos que su fibra soluble fomente
el trabajo del tracto intestinal y te hará sentir saciado con menos alimento
durante el desayuno.
Regula la glucosa en sangre
Una manzana verde en ayunas nos ayuda
a estabilizar los niveles de azúcar en sangre, algo muy importante para las
personas diabéticas o con riesgo de padecer diabetes. Hay que recordar que,
durante las horas en que dormimos, nuestro metabolismo sigue funcionando y el
páncreas puede tener dificultades para regular la glucosa de nuestro cuerpo.
Debido a que la manzana verde es rica en fibra soluble, al comerla en ayunas
retrasa la absorción de azúcar en el intestino y este efecto dura gran parte
del día.
Hay estudios que demuestran que las
mujeres que comen una manzana verde en ayunas tienen hasta 30% menos
probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2. De acuerdo con los médicos,
necesitamos 28 gramos diarios de fibra al día y una manzana verde nos aporta 5
gramos de fibra dietética. Esta cantidad aplicada al ayuno facilita el trabajo
de nuestro cuerpo para el resto del día.
Dientes sanos
Es común que después de una noche de
fiesta olvidemos lavarnos los dientes. Cuando esto te pase, puedes comer una
manzana verde en ayunas y aprovechar su fibrosa piel que estimula la producción
de saliva. Esto te ayudará a disminuir la cantidad de bacterias en la boca, las
cuales atacan los dientes y pueden causar caries. Esta es una buena práctica a
pesar de que vayas a lavar tus dientes después de desayunar porque te ayudará a
evitar que haya demasiadas bacterias que puedan aprovecharse de los endulzantes
del desayuno.
Ritmo cardíaco constante
Otra
razón para consumir una manzana verde en ayunas es que su contenido de potasio
es ligeramente alto en comparación con otro tipo de manzanas. El potasio es un
electrolito que equilibra la humedad de las células. Esto es vital para que el
corazón lata de forma adecuada en todo momento. Si no consumimos la cantidad de
potasio necesaria a lo largo del día, corremos el riesgo de que nuestro corazón
no pueda mantener el ritmo regular. Los científicos indican que necesitamos
4,700 miligramos de potasio al día y cada manzana verde ofrece 115 miligramos
de potasio. Esta cantidad es suficiente para mantener el ritmo cardíaco estable
desde las primeras horas d