Se acerca la cena de Nochebuena y
crees que te han fastidiado porque este año te ha tocado organizarla a ti. No
te preocupes, y míralo como una oportunidad para impresionar a tu familia.
Aunque corres el riesgo de que si sale perfecto, las próximas veces también te
tocará a ti organizarlas. ¡Tú decides!
Sorpresita al empezar
Una de las cosas que más gustan en Navidad son las sorpresas nada más empezar. Sí, y puedes hacerlo con un entrante que no sea dulce. Es más, en la fotografía, puedes ver cómo lo primero que ven los invitados al sentarse a la mesa es precisamente un árbol de Navidad, que en realidad es una galleta de jengibre. En realidad, no cuesta mucho, tienes un montón de recetas en Internet, y puedes decorarlo a tu gusto.
Es más, puedes preparar tú mismo las galletas y poner el nombre de la persona que se va a invitar ahí mismo. Es algo original, y encima queda elegante. Porque no habrá peleas sobre quién se sienta dónde y por qué. Con estos consejos vas a ser el perfecto anfitrión. Y ya te lo hemos dicho, esto puede no ser bueno. Pero como no todo saldrá perfecto la primera vez, ya sabes.
Postre muy original
Todos en tu familia saben que eres un
chapuzas en casa, y más en la cocina, y por eso debes intentar que todo sea lo
más sencillo posible. No intentes sorprender a tu familia con un plato fuera de
tus posibilidades, porque tienes más posibilidades de estropearlo. Así que
nosotros te proponemos un postre simple, vistoso y original: brownies de
chocolate.
Solo tienes que hacer (o comprar), un
brownie de chocolate, fresas y nata. El resto es cuestión de maña y de
paciencia. Pero solo con eso, ya tienes un súper papá noel, dulce y listo para
comer. Es algo muy simple, y que además triunfará porque combina muy bien en
nuestro paladar: tiene chocolate, que combina muy bien con la fresa, y la nata
siempre es un añadido. Quedará de lujo.
Detalles al centro de mesa
Un centro de mesa siempre es
importante, porque llama la atención. Hay gente que los compra directamente,
sin tener en cuenta el resto de la decoración de tu casa. Eso es un error,
porque además es gastar el dinero en algo que no es necesario. Es un detalle
importante, pero no es imprescindible. Así que si no quieres gastar demasiado
dinero, te proponemos esto.
Solo tienes que ver qué es lo que te
ha sobrado de los adornos de Navidad. Normalmente seguro que tendrás los
adornos a juego. Lo único que tienes que hacer es coger una fuente grande de
cristal, y echarlos ahí. Fíjate en la fotografía: es solo un cuenco grande
lleno de bolas de Navidad. Le añades un par de cosas más, como unas piñas
navideñas que hayas cogido en el campo, y ya tienes esto. Perfecto.
Galletas
Si quieres impresionar a los más
pequeños de la casa, lo tienes fácil, y lo único que tienes que hacer es…
¡galletas! Las galletas son fáciles de hacer, y mucho más divertidas de
decorar. Si por ejemplo, la mañana de antes te piden que hagas de canguro, los
reyes de la casa pueden ayudarte a esta tarea, que seguro que disfrutan más que
tú.
Por supuesto, deberías tener una
reserva de galletas bien hechas, por si acaso el estropicio que forman es
demasiado grande. Pero los momentos juntos… eso no te los paga nadie, así que
disfrútalos todo lo que puedas. Lo que ves en la foto son galletas simples de
mantequillas, y luego frosting de colores. Ni siquiera tienes que poner
saborizantes, sino que con el colorante te vale.
Pizza Navideña
La pizza nunca está en el menú de
Navidad, y esto es un gran error. Así que nosotros te recomendamos que la
incluyas en tu propio menú, porque como entrante ligero puede quedar muy pero
que muy bien. Solo tienes que comprar la masa de la pizza (está en la sección
de las neveras, junto a la pasta filo), y luego lo que tú quieras añadir:
verduritas, tomates, o una selección de lechugas.
La verdad es que te puede salir un
producto bastante sano y que a todo el mundo guste. Eso sí, no hagas demasiada
cantidad, porque igual les gusta demasiado y el resto de la cena no se la
comen. Es un puntazo a tu favor que hay que aprovechar. Porque seguro que tú ya
eres un experto en pizzas.
Regalos de Navidad
En Estados Unidos hay una costumbre
que deberíamos adquirir nosotros: ofrecer chocolate caliente a media noche,
mientras se espera a Santa Claus. Mientras, una galleta de jengibre va muy
bien. Deberías aprender a hacerlas, pero si no tienes tiempo porque apenas
quedan un par de días para Navidad, puedes comprarla en alguna pastelería.
Lo bueno de esto es que no necesitas
ni siquiera ir a una pastelería especializada, sino que en muchas pastelerías
ya las venden. E incluso en superficies comerciales. Por eso, lo que tienes que
hacer es intentar hacer las compras con tiempo para que así puedas prepararlo
todo, y si hay un percance tener el tiempo suficiente para arreglarlo.
Servilleta de Navidad
El éxito está en los pequeños
detalles. Es por eso que algo tan simple como una servilleta puede hacer
sonreír a mucha gente. Además, si tienes el detallito de que tenga forma de
árbol de Navidad, seguro que a más de uno le gustará. En Internet hay muchos
tutoriales, y no te llevará más de una hora aprender a hacerlo y
perfeccionarlo.
Pero no solo eso: si crees que los
árboles de Navidad no son lo tuyo, hay mil formas de doblar una servilleta.
Puede parecerte una tontería, pero hay muchísima gente que se dedica a esto.
Así que no te preocupes si te sientes tonto, porque los pequeños detalles son
los mejores.
No te olvides los regalos
En las grandes fiestas, se suele dar
un detallito a los invitados cuando se van. Nosotros te recomendamos que hagas
esto, sobre todo si no te llega el dinero para regalar algo en condiciones a
todos los miembros de la familia. En teoría, con la cena debería bastar, pero
ya sabes cómo es la familia. Entonces, si tienes tiempo, haz algo tú mismo.
Mira lo que se puede hacer con un par
de caramelos: es algo impresionante, porque en realidad, lo que hay en las
cajitas puede ser una tontería, y no valer mucho. Pero el esfuerzo sí, y eso ya
lo valorarán. Y si el regalo es para un niño… ¿quién dice que no a un niño?
Regalos simples
Ya te hemos dado el ejemplo de los
regalos de los caramelos para los niños… ¿Y para los padres? Bueno, si son muy
de té o de café, puedes optar por algo parecido a esto: un kit para hacer su propia taza de chocolate (o té, o café),
en mitad de la noche. Es muy navideño, sobre todo si añades crema de avellanas,
que eso siempre le da un toque navideño.
Tienes que tener claro una cosa: que
el detalle es lo que cuenta. Y no te sientas raro, porque hayas dado una cena
de Navidad a tu familia, y los regalos no sean caros: siempre contarán todo el
tiempo que has invertido.
Envolver regalos
Y si después de todo esto, te ha
sobrado tiempo y dinero y has comprado regalos para tu familia… te damos un
consejito: envuélvelo bien, así de bonito, porque hace mucha más ilusión. Puede
que no sea tan impresionante lo que haya dentro, pero siempre se recibe con más
ilusión un regalo cuando está envuelto de esta forma.
Así que saca celo y tijeras, y ponte a
envolver. Además de regalos, el árbol de Navidad, rodeado de muchos paquetes, y
con las luces alrededor, te quedará de lo más bonito y vistoso, y eso también
es un añadido.