Fue una
de las historias más conocidas del siglo XIX en lo que se relaciona con el
nacimiento del espiritismo en Inglaterra. William Crookes, célebre científico,
fue capaz de seguir bien de cerca su investigación, llegando incluso, dicen, a
enamorarse del propio fantasma. Toda una historia que nos trae esta semana
Jesús Callejo en el cronovisor