Aunque
son muy populares las leyendas de terror y desamor, no son los únicos temas que
existen. A continuación, veremos 12 leyendas cortas que han persistido durante
muchos años en distintas partes del mundo.
1.
Nessie
Mejor
conocida como “El monstruo de Lago Ness”, esta leyenda forma parte del folclore
escocés y cuenta la historia de una criatura gigante con apariencia
prehistórica, que apareció por primera vez en el siglo XVI en el Lago Ness,
pero que ha sido vista incluso en épocas recientes. La leyenda retomó fuerza
cuando aseguraron verlo en el año de 1933, lo que ha inspirado distintas
películas y mantiene en suspenso a quienes visitan el lago.
2. El
molino de sal
Está
leyenda nórdica cuenta que hace muchos años existía un gigante que tenía un
molino mágico. El molino era pequeño y podía producir sal. Un día, el gigante
se lo regala a una mujer viuda y a su pequeña hija. Ambas trabajan con el
molino y obtienen tanta sal que pueden venderla al pueblo. Desafortunadamente
un duende, celoso del molino, lo roba y lo arroja al mar. Y por está razón el
agua del mar es tan salada.
3.
Robin Hood
También
conocido como el “príncipe de los ladrones”, Robin Hood es de los personajes
ingleses más conocidos en las leyendas de la cultura occidental. Su historia se
ha inspirado en distintos personajes, aunque uno de los más mencionados es
Ghino di Tacco, héroe italiano de siglo XIII. Los registros escritos sobre
Robin Hood se han ubicado desde el siglo XIII, aunque ganó popularidad a partir
del siglo XV.
Se
trata de un hombre que se enfrentaba con los ricos para defender a los pobres.
Sin que se dieran cuenta, le quitaba pertenencias a los primeros para dárselas
a quienes las necesitaban más; siempre en compañía de su traje verde, su arco y
sus flechas.
4. La
Llorona
La
Llorona es una leyenda de origen latinoamericano, especialmente popular en
México. La versión más difundida cuenta la historia de una mujer que había
sufrido el rechazo de su marido, y ella, en señal de despecho, asesinó a sus
hijos. La culpa la hace regresar por las madrugadas en la forma de un fantasma
que grita “¡Ay mis hijos!”.
Otras versiones
cuentan que se trata de una representación de La Malinche, mujer que ejerció
como traductora e intérprete de Hernán Cortés durante “la conquista” de
América. En este caso, el grito de sufrimiento tiene que ver con que algunas
versiones del proceso de colonización, han atribuido injustamente a la Malinche
la responsabilidad sobre lo ocurrido.
5. Tanabata
En esta
leyenda japonesa, Orihime (que significa princesa que teje) era hija de de
Tentei, el señor del Cielo. A este último le encantaba la ropa que Orihime
tejía; pero ella, en cambio, se encontraba desanimada porque gracias a su duro
trabajo, no había tenido la oportunidad de enamorarse. Tentei, preocupado, le
presenta a Hikoboshi, de quien se enamoró perdidamente. Al casarse, ambos
dejaron de cumplir con los mandatos de Tentei, con lo cual el señor del Cielo
termina por separarlos.
Ante
las lágrimas de Orihime, Tentei les permitió encontrarse al séptimo día, una
vez terminadas sus responsabilidades (por eso el nombre de Tanabata, que
significa “Noche del séptimo”). Pero para esto tenían que atravesar un río
donde no había puente. Ella lloró tanto que una bandada de urracas se acercó
para hacer de puente con sus alas. Actualmente, existe un festival en Japón que
se llama Tanabata, o Festival de la Estrella. Según la leyenda este es el día
en que los amantes que han sido separados se reencuentran.
6.
Krampus
Personaje
popular en el este de Europa, que ha sido descrito como mitad cabra, mitad
demonio: tiene un par de cuernos gigantes, patas muy grandes y un cuerpo
peludo. Cada navidad, Krampus viene a sancionar a los niños que se han portado
mal; en contraste con San Nicolás, Santa Claus o Papa Noel, que viene a premiar
a quienes han sido muy educados. Se trata de un persona cuyo origen está vinculado
a la cultura religiosa anterior al cristianismo.
7. El hombre lobo
El
hombre lobo es probablemente una de las leyendas que más ha inspirado cuentos y
películas en Europa. Cuentan que, a finales del siglo XIX, un hombre con
licantropía asesinó a 17 personas. La explicación que él mismo dio es que por
las noches, se transformaba inevitablemente en un lobo cuya necesidad
insaciable era asesinar. En otra versión, de origen guaraní, existe un humano
de aspecto desgarbado y olor desagradable que se transforma en lobo durante las
noches de luna llena, y se dedica a atacar granjas y buscar carroña.
8.
Popocatepetl e Iztaccihuatl
Cuenta
la leyenda que en el imperio Azteca había un importante guerrero llamado
Popocatépetl, que amaba a la hija de uno de los jefes: Iztaccihuatl. Antes de
irse a una guerra, Popocatépetl se despide de Iztaccihuatl prometiéndole que
volvería por ella. Desgraciadamente, otro de los soldados que también estaba
enamorado de ella, difundió la falsa noticia de que Popocatépetl había muerto en
combate.
Cuando
Iztaccíhuatl se enteró, decidió quitarse la vida. Tiempo después el guerrero
vuelve por ella, y al encontrarse con que estaba muerta; no aguantó la tristeza
y murió también. Ante esto, los dioses se conmovieron y los transformaron en
dos de los volcanes más grandes del centro de México, que actualmente llevan
sus nombres.
9. El
holandés errante
Una
leyenda que se remonta al siglo XVII, donde un capitán holandés llamado Hendrik
Van Der Decken hacía un viaje en barco con rumbo a la India. En eso, una fuerte
tormenta azota su barco, a lo que el capitán se resistió con fuerza y
determinación. Esto desafió la autoridad de Dios, quien condenó al capitán a
vagar, junto con su barco, sin rumbo por todo el océano. Desde entonces, cuenta
la leyenda que el fantasma del holandés errante se aparece a media noche junto
con otras almas en pena. Su aparición es además sinónimo del mal augurio para
los capitanes que lo avistan.
10.
Anahí y la flor de ceibo
En las
orillas del Paraná, al este de Argentina, vivía una joven guaraní que cantaba
de una manera especial. A la llegada de los “conquistadores”, Anahí fue apresada
junto con otras personas del pueblo. Una noche se escapó, pero rápidamente la descubrieron.
Su condena fue la muerte, atada a un árbol para quemarla. El día que se cumplió
la condena, y mientras su cuerpo ardía, Anahí comenzó a cantar. A la mañana siguiente,
en el lugar donde su cuerpo se hacía consumido, aparecieron varias flores
rojas, que ahora son la Flor Nacional Argentina y se llaman “Flor de ceibo”.
11. El
hilo rojo
Cuenta
una leyenda corta proveniente de China que hace muchos años, un emperador pidió
que fuese a su palacio una reputada bruja para que, mediante sus poderes
mágicos, le mostrase con qué mujer se debía casar. La bruja, gracias a sus
cualidades, era capaz de ver un larguísimo hilo rojo atado al meñique del
emperador, y cuyo otro extremo debería estar el meñique de aquella persona
predestinada a ser la futura esposa.
Así, la
bruja y el emperador empezaron a rastrear el origen del hilo, hasta que después
de viajar durante varias semanas vieron que este llevaba a una campesina pobre
vestida con harapos y a cuyos brazos llevaba un bebé cubierto de suciedad.
Airado al verse a sí mismo víctima de una broma, el emperador empujó a la
campesina, cayéndole el bebé al suelo y dejando una herida en la cabeza de
este, y se volvió a palacio tras ordenar el arresto de la bruja.
Muchos
años después, tras ser aconsejado por el consejo de sabios, el emperador
decidió casarse con la hija de un terrateniente del lugar; al iniciarse la
ceremonia de boda y levantar el velo que cubría el rostro de su futura esposa,
vio en su frente una cicatriz que le resultaba familiar.
12. El
Zorro y el camello
En esta
leyenda corta proveniente de África, un zorro y un camello se hacen amigos y
deciden cruzar un río para comer los alimentos disponibles en la otra orilla.
Para ello, el zorro se sube a la espalda del camello, y este cruza aprovechando
su peso para resistir la corriente.
Una vez
que llegan a la otra orilla, ambos animales se separan y el camello va a comer
a un campo de cebada, mientras que el zorro va a comer insectos. Pero el zorro
termina de comer antes, y satisfecho por sentirse saciado, empieza a cantar a
viva voz. Estos gritos llaman la atención de los campesinos que cuidan el campo
de cebada, los cuales van a examinar la zona y se encuentran al camello.
Cuando
el zorro va en busca de su amigo, se lo encuentra tendido en el suelo, dolorida
por la paliza que le acaban de dar los campesinos. "¿Por qué has hecho
tanto ruido?", pregunta el camello. El zorro le responde que tiene la
costumbre de cantar tras comer insectos. "Ya veo. Pues si eso es todo,
volvamos". Al cruzar el río de vuelta, el camello empieza a bailar con
medio cuerpo sumergido en el agua. "¿Qué haces? ¡No sé nadar!" dice
el zorro, aterrado. "Es que tengo la costumbre de bailar tras comer cebada",
responde el camello, mientras el zorro cae al agua y es arrastrado por la
corriente.