martes, 14 de julio de 2015

¿POR QUE ESTA TAN MALA LA COMIDA DEL AVION?

La respuesta es bastante sencilla: la comida de avión no sabe mal porque sabe a rayos. Aun así, nos viene a la cabeza la siguiente pregunta, y es por qué sabe tan mal la comida de aviones. Y la respuesta también es fácil de saber, y es que aunque tienen cocina, solo está reservada a la parte más exclusiva, y el resto nos tenemos que aguantar con una especie de comida enlatada y precocinada. Cuando te acostumbras, no está tan mal. Pero antes, te sabe a rayos y a los mil demonios.
La Universidad de Cornell ha estado estudiando este sabor, y han encontrado una explicación: es el aire seco que hay en las cabinas de los aviones lo que produce que la comida tenga este sabor. Así pues, da igual qué es lo que comas. Tanto si es el plato favorito hecho por tu madre, como si es algo nuevo, te sabrá mucho peor que cuando tienes los pies en tierra.


Por supuesto, también está el hecho de que se tiene que calentar, ya que las cocinas que hay en los aviones no pueden tener salidas de humo, ni similares. Así que se calientan en hornos de convección, y a partir de ahí, salen del paso.

Además, hay otros estudios, hechos por las propias compañías aéreas, que determinan que las papilas gustativas se duermen cuando les afecta el cambio de la presión por la altura. Por eso, la percepción de dulces y salados se acaba reduciendo hasta un 30%. Es decir, no es la comida del avión lo que sabe mal, sino que son nuestros propios sentidos los que funcionan mal y no detectan bien el sabor.
Las propias compañías están intentando solucionar esto. ¿Cómo? Eligiendo sabores más característicos para sus cartas. Por ejemplo, se está intentando potenciar mucho más el sabor del tomate, ya que al parecer, la presión de la cabina atrae el punto de sal de estos alimentos.