Con el verano y las maletas ya listas,
no debemos olvidar que sin importar que nuestro destino sea playa, montaña o
ciudad, debemos protegernos de los rayos UV. Por ello la Cámara y Asociación de
la Industria del Cuidado Personal y del Hogar (CANIPEC) nos ofrece algunas
recomendaciones para que logremos sacar mayor partido a nuestro protector solar
y cuidemos nuestra salud.
Cuando nos exponemos al aire libre
durante las vacaciones, es fácil olvidar protegerse del sol; estamos más
entretenidas checando el traje de baño, el outfit para el antro o dónde dejamos
los boletos de avión. Nos olvidamos de que el sol no solo provee a la tierra de
calor y luz, sino que afecta a nuestro cuerpo: nos permite la síntesis de
vitamina D y brinda beneficios en el estado de ánimo. Sin embargo, la
exposición a sus radiaciones ultravioleta (UV) sin protección puede causar
efectos dañinos en la piel.
Existen tres tipos de rayos UV:
Los rayos UVA. La piel tiene una
capacidad de absorción muy alta de este tipo de rayos. Son capaces de envejecer
las células, provocando arrugas y daños a la piel. Además de que dañan el ADN
de las células.
Los rayos UVB. Aunque son absorbidos
parcialmente por la capa de ozono, actúan principalmente en la epidermis
causando daño en el ADN de la piel y provocan quemaduras en la piel.
Los rayos UVC. Estos rayos son los más
peligrosos para el ser humano; sin embargo, gracias a la capa de ozono, no
llegan a la superficie terrestre.
Para evitar que los rayos UV provoquen
estragos en tu piel, he aquí algunos tips que puedes poner en acción para
proteger tu piel y disfrutar del sol y sus delicias.
Es importante leer las instrucciones
del protector solar que elijas.
Debes aplicar una buena cantidad: se
recomienda aproximadamente unos 20ml., lo que equivale a un vaso de tamaño
tequilero, para esparcirlo en todo el cuerpo.
Aplicar el protector solar cada 2
horas; sobre todo si estamos expuestos a una gran cantidad de rayos UV por
nuestra actividad laboral, por estar de vacaciones, por las condiciones del
lugar donde vivimos.
Debes seleccionar el protector solar
de acuerdo a tu tipo de piel; en el mercado existe una amplia gama de productos
que se ajustan a las necesidades y característica de las personas.
Si estás de vacaciones y te sumergiste
en la alberca es importante reaplicar el protector después de salir del agua.
Recuerda consumir líquidos que ayuden
a hidratar tu cuerpo
Usa sombreros, gafas para sol y
sombrillas
Lleva ropas de colores claros que te
protejan del sol. Utiliza tejidos tupidos que no dejen pasar la luz pero
permitan el paso del aire, el algodón es una buena opción.
Planea tus actividades al aire libre
fuera de las horas de mayor insolación (entre 10 am y 4 pm)
Fuente: CANIPEC (Cámara y Asociación
de la Industria del Cuidado Personal y del Hogar)