Ni las máquinas expendedoras, ni el
antiguo arte de la papiroflexia son nuevos en Japón, pero ahora es posible
obtener fácilmente piezas de papel ingeniosamente dobladas en máquinas
expendedoras japonesas.
Las máquinas expendedoras de alimentos
y bebidas pueden encontrarse fácilmente en todo el país, pero este nuevo uso de
las máquinas reconoce específicamente celebraciones culturales como el Día de
las Niñas, el Día de los Niños, y el Día del Niño.
La máquina ofrece diseños de origami
que cambian estacionalmente, tales como piezas interactivas como labios que se
abren y se cierran, ranas que saltan y tapas de papel que giran. Cada una de
estas delicadas piezas de arte se dispensa en una funda protectora de plástico.
En algunos casos, las esculturas de
origami también vienen con pequeñas bolsas de monedas, que se utilizan para dar
dinero a los niños en celebraciones especiales.