Todos tenemos sueños en la vida, a veces con el paso del tiempos esos sueños cambian o se cumplen. Soñamos con viajar por el mundo, estar con el amor de nuestras vidas, tener una casa, dinero o fama.
Pero, ¿qué pasa cuando esos sueños no se cumplen?, decimos que tuvimos mala suerte o que no era nuestro destino pero en realidad nunca nos detenemos a pensar en por qué no se realizaron esos sueños, tan solo culpamos a la vida o al destino pero no nos damos cuenta de que no se cumplieron porque cada cosa se logrará dependiendo de nosotros mismos.
Cuando nuestros sueños no se cumplen quedamos sumergidos en la mas profunda decepción, pero hay que ser objetivos y ponernos a pensar que tal vez puede que esos sueños no sean lo mejor para nuestra vida y que probablemente haya algo mejor a la vuelta de la esquina. El destino siempre nos mantiene a raya, nada de estar pensando que todo es fácil en la vida.
Hoy en día parece que la vida e más difícil, no hay suficiente dinero en casa para pagar todas las cuentas, no nos alcanza el dinero, esperas por algo que parece no llegar mucho… y es que son sueños, sólo sueños. La realidad es que hay que trabajar y luchar por lograr alcanzar esos ideales.
La vida es dura y hay dolor en ella, para que todo tenga un equilibrio en la vida, debemos ser consecuentes con nosotros mismos, nosotros mismos forjamos nuestro propio destino. No debemos vivir de nuestros sueños, sino de nuestras realidades. Los sueños se nos cumplirán a medida que nosotros mismos trabajemos en hacerlos realidad.
La vida es un montón de emociones, alegrías, tristezas, sueños rotos y sueños realizados.
¿Cuáles son tus sueños sin cumplir?
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