Sin embargo, los más exigentes, quienes no se conforman con las clásicas opciones enlatadas y son demasiado vagos como para buscar una receta, comprar los ingredientes y ponerse a cocinar, tienen otras alternativas: existen en el mercado toda clase de productos comestibles que se comercializan en latas.
A continuación te mostramos unos ejemplos:
Para quienes gusten de las comidas rápidas, pero no quieran salir de sus casas, tenemos hamburguesas enlatadas, que se pueden acompañar con panceta ahumada.
Si la idea es comer algo más elaborado, también se puede conseguir un guiso con salchichas y champignones, cerdo al horno o albóndigas y salchicas con arvejas y puré.
El pollo también se puede conseguir enlatado. Tenemos la opción de comprarlo crudo, o frito, listo para calentar.
Para los exquisitos, y quienes se animen, hay patas de rana gourmet, carne de armadillo, anguilas y calamares.
Si después de este exquisito menú todavía te quedaron ganas de comer, o quieres enterarte qué otras comidas se ofrecen enlatadas, puedes verlas en Awesome Robo, el blog que se encargó de armar una lista con las comidas enlatadas más insólitas.
http://www.awesome-robo.com/2011/02/30-wtf-canned-foods.html
2 comentarios:
Hola Almalu, es fácil y cómodo, pero no para todos los días. En algún momento excepcional esta bien,nos soluciona rápido la comida, pero nada más, pues no debemos olvidar que no es sano.
Un abrazo.
hola maric:
te doy toda la razon, no es lo mismo que cocinar toos los dias que abrir latas todos los dias, el sabor y la textura de la comida es totalmente diferente en el sabor.
recibe un fuerte abrazo
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